22 de febrero de 2024
¡EVIDENCIAS!
Cuando se les pide a los cristianos que presentan evidencias de que sus creencias están basadas en la verdad y no en leyendas e ilusiones, inevitablemente mencionan la resurrección de Jesús”
-Ravi Zacarías .
Un joven de Estados Unidos llamado Jessie en un momento de desesperación le envió un mensaje al Dr. William L. Craig pidiéndole una breve aclaración sobre quién era verdaderamente Jesús, ya que su fe estaba siendo atacada por los argumentos ateos. Después de haber leído la inquietud de aquel estudiante, el Dr. Craig respondió: “Yo creo que lo que pensamos acerca de la resurrección de Jesús al final va a determinar lo que pensamos acerca de su persona”.
Me sorprende la respuesta de William y estoy totalmente de acuerdo. Si tenemos la certeza de que Jesús resucitó de entre los muertos, podemos estar convencidos de que Él es el Mesías. Vamos a tomar en cuenta este pensamiento ya continuación nos estaremos basando en algunas de las evidencias que nos muestran si verdaderamente Jesús es quien afirmaba ser o simplemente es una mentira para hacernos creer lo contrario desde hace más de dos mil años.
Vamos a observar detalladamente las siguientes evidencias:
La tumba está vacía.
Tenemos la seguridad de que la tumba fue encontrada y estaba vacía. Los judíos acusaron a los discípulos de robar el cuerpo de Jesús, es corroborado por el apologista cristiano Justino Mártir, en la mitad del segundo siglo y por otro lado, alrededor del año 200 dC, por Tertuliano el padre de la iglesia. También tenemos la investigación del Sudario de Turín, que fue encontrada en la tumba donde Jesús fue sepultado, parece ser la sabana en la que fue envuelto un hombre que ha sido crucificado. Hay marcas en las manos y los pies que son consistentes con las heridas infligidas por crucifixión. También parece haber heridas similares a las que se describen en la tortura de Jesús, alrededor de la cabeza, espalda y piernas. Es mucha la coincidencia, pero por un motivo u otro Dios no permitió que el Sudario se quemara en ningunos de los tres incendios que se ha enfrentado. La sabana se enfrentó al fuego antes del 1200, fue dañada, extinguida y reparada por un grupo de monjas en la catedral donde el Sudario fue resguardado. Luego en 1532 el Santo Sudario casi fue destruido. Un incendio dañó el tejido al perforarlo con una gota de plata fundida del relicario en que se guardaba. Y en el incendio de 1997, cuyo origen aún se desconoce, la capilla Guarini que aloja la reliquia y se encuentra entre la Catedral y el Palacio, se vio envuelta en las llamas.
El testimonio de las mujeres.
En los cuatro evangelios la Biblia nos muestra que cada uno de los autores escriben la resurrección de Jesús de diferentes maneras, o mejor dicho, con detalles diferentes. Pero, los cuatros están de acuerdo con que las primeras personas en ver a Jesús resucitado fueron mujeres, las primeras en testificar la resurrección del Mesías. Según los eruditos bíblicos y los historiadores, dicen que a las mujeres la tenían como que su testimonio no era confiable y aún sabiendo Jesús que el testimonio de las mujeres en aquellos tiempos no eran escuchados, las elegidas. Lo que una vez fue “absurdo” es ahora un testimonio claro de la resurrección con una credibilidad histórica real.
El testimonio de los guardias.
Los judíos acusaban a los discípulos de que se iban a robar el cuerpo, simplemente porque ellos no creían que Jesús resucitaría. Por esta razón pusieron los mejores guardias a cuidar la tumba de Jesús. Según cuenta la historia, aquellos guardias romanos estaban entrenados para durar días despiertos, (por eso lo pusieron en ese escenario). estos guardias no podían dormirse porque ellos pagaban con su vida por cualquier error que fuera cometido, esto los llevaba a ser expertos en si oficio, en pocas palabras, ellos estaban preparados para evitar que se roben el cuerpo, era casi imposible que ellos se quedaran. dormidos, al menos que Jesús los haya puesto a dormir. Y esto fue lo que pasó, según Mateo 28:4. El sello de la puerta fue roto y fue removida la piedra que cubría la entrada de la tumba. A los guardias los encontraron durmiendo sin idea de lo que pasaba y con la puerta abierta, y después del informe de los guardias que está registrado en el versículo 11 se desató una búsqueda para capturar a los discípulos, por la razón de que a los guardias los obligaron a decir que fueron los discípulos los culpables de todo, simplemente para no afirmar la resurrección de Cristo.
Los discípulos morían por su creencia.
La Biblia enseña que después de Jesús morir en la cruz, resucitó al tercer día y duró alrededor de 40 días en la tierra, en los cuales se le aparece 17 veces a los discípulos, y 11 de esas apariciones, fueron cuando estaban todos juntos ( menos Judas el Iscariote). Esto llevó a los discípulos a dar sus vidas por lo que ya habían visto. ¡Es lógico! si ellos tenían el cuerpo de Jesús, no iban a permitir que les quitaran la vida por una mentira, y mientras los iban capturando, también podían haber encontrado el cuerpo de Jesús, pero nada de esto sucedió, porque Jesús resucitó y los discípulos estaban convencidos. de eso, por esta razón preferían morir antes de negar la resurrección. Pero Jesús sabía que a ellos no les iban a creer, eso lo llevó también a presentarse una docena de veces a cientos de personas, algunos creyentes y otros que creyeron después de verlo resucitado. Jesús compartió cena con muchas de aquellas personas, les predicaba como acostumbraba a hacerlo y muchos de ellos se maravillaban al verlo, porque fueron testigos oculares en el día que se llevó a cabo la ejecución de Jesús. Esto hizo que el testimonio de que Él fue resucitado se expandiera por toda la tierra, y gracias a esas personas hoy podemos decir que él vive.
TENEMOS UN PERSONAJE MUY CERCANO A JESÚS, NO SE NOS PUEDE ESCAPAR HABLAR DE SU TESTIMONIO, SERÍA DE GRAN IMPORTANCIA HABLAR DE ÉL EN NUESTRO SIGUIENTE PUNTO.
Santiago (el hermano de Jesús)
En Jerusalén Esta fue una de las pocas personas que tuvieron el privilegio de estar con Jesús toda su vida y ver como Él actuaba cada vez que le hacían algo que le podía molestar. Su hermano Santiago, tenía que ser el primero entre sus discípulos, pero nada fue así, él era escéptico. Me imagino cómo se sentía Santiago al ver a Jesús y pensar que su hermano iba a ser El Salvador del mundo. Creo que cualquiera de nosotros dudaría porque es algo extraño que tu hermano sea el Mesías que tanto hemos esperado y verlo como carpintero trabajando como un hombre normal. Pero a pesar de todo esto podemos ver el testimonio de Santiago. De un momento a otro él empieza a creer en Jesús, y se le llama líder de la iglesia en Jerusalén. Josefo afirma que Santiago es asesinado por causa de lo que predicaba. Pero todo esto pasó después que ve a su hermano resucitado. Si Jesús no hubiera resucitado entonces no fuera el Mesías, y si no fuera el Mesías entonces Santiago y muchos incrédulos no hubieran tomado la decisión de creer. He tenido amigos muy escépticos y algunos ateos, yo sé lo difícil que es hacer que ellos crean en Dios, ellos son de esas personas que dicen “cuando yo vea entonces yo creo”, pero todo cambia cuando vemos como Santiago fue transformado al igual que Tomás quien Jesús llamó para que entre sus dedos en sus heridas.
Domingo, (día de adoración).
Muchas veces me preguntaba ¿Por qué el domingo es el día que le dedicamos al Señor? Llegué a pensar que quizás es porque es el séptimo día de la semana y como está escrito, que debemos guardarlo, entonces por eso lo hacíamos. Pero luego de haber investigado, me doy cuenta nada más y nada menos de que ese día fue elegido porque creemos que fue el día que Jesús resucitó (domingo).
En una larga conversación entre el gran filósofo JP Moreland y el autor de mayores ventas del New York Time, Lee Strobel. Después de que el escritor le había hecho algunas preguntas a Moreland acerca de la resurrección, este hizo una pausa y enfatizó, “Hay una categoría de evidencia sobre la cual usted no preguntó… es el continuo encuentro con el cristo resucitado que ocurre en todo el mundo. , en todas las culturas, por partes de personas de todo tipo de trasfondos y personalidad: bien educados y no, ricos y pobres, los que piensan y los que sienten, hombres y mujeres, -anunció- Todos declararán que más que cualquier otra cosa en sus vidas, Jesucristo los cambió.
Después de todo esto, el autor continúa hablando de aquella larga conversación y resalta un punto que el Dr. Moreland tocó, Strobel dice que Moreland se inclinó hacia adelante para dar énfasis, y dijo: “Para mi esto constituye la evidencia final; no solo la evidencia sino la prueba corroborativa definitiva, de que el mensaje de Jesús puede abrir la puerta a un encuentro directo con el Cristo resucitado”. Es indiscutible la evidencia que Moreland presenta, la cual estoy totalmente de acuerdo porque conmigo Jesús hizo una transformación radical en el momento que más lo necesitaba.
Las evidencias presentadas en esta investigación son simplemente algunas de las muchas que ya existen en la historia de nuestro Mesías para confirmarnos que Jesús es quien afirmaba ser. Yo no las necesité para creer en Él, simplemente lo acepté y Él me convenció de que Él es quien decía ser, pero después de haber investigado todo esto, puedo dar testimonio de que Jesús es el Mesías resucitado, simplemente usando el razonamiento.